domingo, 22 de diciembre de 2019

Recuperando viejas costumbres

Hace poco leía a una amiga que decía que sentaba bien recuperar viejas costumbres, y hoy he corroborado que es verdad. Aunque aún tengo pendiente recuperar la escritura y tener mucho más actualizado este bog, hoy he recuperado una vieja costumbre: realizar la felicitación navideña enredando un poquito con el Photoshop. Hacía unos cuantos años que no lo hacía, y este ha sido el resultado.


A pesar de que la Navidad no es la época que más me gusta del año, porque echo mucho de menos (los doce meses) a dos personas en concreto, admito que sí me gusta recibir mensajitos de amigos y familiares. Espero que paséis unas buenas fiestas navideñas y que el 2020 sea mucho mejor que el año que está finalizando.

One More Sleep - Leona Lewis

lunes, 25 de noviembre de 2019

¡Queremos tíos buenos!

El lema que la Diputación Foral de Bizkaia ha elegido este año en el Día Internacional contra la Violencia hacia las mujeres me ha encantado: "¡Queremos tíos buenos!"

Y añade que "los tíos buenos respetan, valoran, apoyan, comparten, reconocen, no controlan, no humillan, no insultan, no agreden, no matan"


Poco más se puede añadir. Un mensaje directo, claro y cierto. Los tíos que nos gustan no tienen por qué estar buenos (eso ya va a gusto de cada cual), pero sí tienen que serlo si queremos erradicar la violencia machista.

Y aunque algunos partidos políticos la quieran cambiar el nombre, el significado y la importancia, la violencia machista existe y no se puede negar que, por desgracia, hay muchos hombres que asesinan a las mujeres solo por el hecho de serlo, porque se creen superiores y porque las sienten de su posesión. Por eso, los mensajes como el de esta campaña son tan necesarios y no solo cada 25 de noviembre, sino los 365 días del año.

La puerta violeta - Rozalén

40

With A Little Help Of My Friends es una canción que tiene su versión más famosa en la voz de Joe Cocker. Sin embargo, esa no será la que cuelgue al final del post. Con el permiso del cantante inglés, yo me voy a decantar por la que el grupo Bon Jovi realizó allá por el año 1992. En esa época , y aunque suene difícil de creer, yo aún no los había descubierto. Pero hoy me sirve para agradecer a mis amigos una fiesta de cumpleaños impresionante. Sois los mejores.

domingo, 24 de noviembre de 2019

Cumpleaños musical


El pasado 15 de noviembre, la cantante Marta Soto cumplió 23 años y lo celebró dando un concierto en la sala Stage Live de Bilbao. Un día antes, servidora cumplió unos poquitos más (40) y mi auto regalo fue una entrada para poder verla en directo. Además, para verlo como a mi me gusta: de pie y lo más cerca posible del escenario. Yo creo que una segunda fila, no estuvo nada mal.

A las 9 de la noche salió al escenario Daniel Ruiz, productor de la artista onubense y encargado de tocar tanto el piano como la guitarra acústica. Comenzó a tocar los acordes del tema “Nos hace falta valor”, y a continuación salió Marta Soto, que no pudo evitar la cara de sorpresa al ver el regalo que la habían preparado los asistentes a la sala: las manos en alto sosteniendo carteles en los que se podía leer “Sigamos celebrando muchos años más”. Seguidamente, se colgó una guitarra y comenzó a cantar el tema.

 

Continuó con las canciones “Qué curiosidad” y “Miénteme a la cara”. Agradeció el cariño recibido hace un año, y el que se estaba encontrando esa noche. En todo momento mantuvo una sonrisa en la cara y muchísima interacción con el público. Presentó el tema “Coge mi voz”, y siguió con la canción “Tantos bailes”. A continuación, se quedó sola en el escenario y se dirigió al piano. Y ahí, aún siendo ella la cumpleañera, nos hizo el primer regalo de la noche. Tocando ella el piano, sin ningún acompañamiento más, cantó el tema “No soy yo”, del que dijo que solo lo había cantado dos veces en público. Un tema intimista y precioso.

Nuestra réplica fue cantarla el “Zorionak zuri” (cumpleaños feliz en Euskera) y ella respondió con un Happy Birthday en inglés y, a continuación, guitarra colgada al cuello, nos presentó uno de los temas nuevos que está preparando: “Hoy en el metro”.



“Me contradigo” fue la siguiente canción, a la que siguió “Entre otros cien”. Al terminarla, dijo que la gustaría volver a cantar un poquito de este mismo tema y que la acompañáramos para poder dejar recuerdo del momento en Instagram. Por supuesto, los asistentes aceptaron la propuesta y la de Huelva cumplió su palabra.

La reivindicación “que viva el amor libre” sirvió para introducir el tema que da nombre al disco y a la gira, “Míranos”. Terminada esta, presentó a su equipo, comenzando por la persona que la acompañaba en el escenario, el productor gaditano Daniel Ruiz. Y anunció la última canción del concierto. Al ver la pena exclamada por los y las asistentes reveló que muy probablemente no lo fuera. Cantó “Ya lo sabes” tanto con música como sin ella y hasta un trocito sin micrófono, demostrando la espectacular voz que tiene esta mujer.

Como todo concierto que se precie, tanto el músico-productor como la cantante abandonaron el escenario, y el público pidió los bises de rigor, que fueron pronto atendidos con la vuelta al escenario de los dos. Marta Soto comenzó a cantar el tema de Alejandro Sanz “A que no me dejas” llevándoselo a su terreno y aplacando las ansias de más música en la sala. El siguiente bis fue una petición del público. Un chico de la primera fila solicitó un tema compuesto por ella, pero que no canta habitualmente, ya que es Malú quien lo tiene en su repertorio. Admitiendo que era algo totalmente improvisado, preguntó a Ruiz si se acordaba de los acordes y comenzó a cantar “Oye”.



 Ahora sí que sí terminaba esta velada en el Stage Live. “Quiero verte”, una de las canciones más solicitadas y esperadas, puso broche final a este concierto. Debo admitir que eché en falta “Por si regresas”, uno de los temas del disco, pero también que si ya me gustaba cómo canta esta onubense, ahora me gusta mucho más. Tal vez fuera porque hacía tiempo que no iba a un concierto tan anhelado, pero pocas veces he visto tanta interactuación con los y las asistentes. Algo que, al menos yo, agradezco muchísimo; y, para mi fue un excelente regalo de cumpleaños.

domingo, 12 de mayo de 2019

domingo, 6 de enero de 2019

Vivir

Empieza un nuevo año, después de uno bastante intenso. Uno en el que no he pasado por el blog, aunque debo confesar que he tenido varios intentos. Creo que es porque no sé cómo contar sin contar expresamente todo lo que he vivido desde que escribí mi última entrada. Supongo que puede que haya llegado el momento de saltarme mis propias reglas.

Como se deducía por mi última entrada y sobre todo, por la elección de la canción y del día de publicación, hacía escasos días que me habían diagnosticado una enfermedad un tanto preocupante. El día Internacional de cáncer de mama, mi oncóloga solicitaba opinión a otra colega sobre si debían hacerme alguna prueba más. Esta segunda especialista, casualidades de la vida, fue la que me llevó durante todo el proceso de quimioterapia y aún me sigue llevando junto con otro oncólogo.

Después de ocho sesiones de quimioterapia, la resonancia reveló una excelente noticia: Había habido una remisión completa. Sin embargo, debido al tipo de tumor que era, no me libré de una mastectomía radical y varias sesiones de radioterapia. Y como bien apuntó mi oncóloga: “porque no tenemos más cosas”.

Debo admitir que afrontar la mastectomía no fue tan duro porque tuve siete meses para asimilarla y que la radioterapia, al no esperarla, me “dolió” un poquito más. Pero también fue bastante llevadera, la verdad. Al menos en mi caso.

Lo que sí que es verdad es que pasar por esta enfermedad te hace dar un vuelco a la cabeza bastante importante. Algo te hace un “clic” y sientes muchas cosas de diferente manera. Creo que por eso me gusta tanto la canción que canta Rozalén junto con Estopa. Me identifico prácticamente con toda la letra y, a diferencia de otras escritas para la misma causa, consigue sacarme una sonrisa. Algo que ahora procuro hacer más que antes.

Vivir – Rozalén y Estopa

 Así que, como regalo de Reyes me quedo con esta segunda oportunidad que se me está dando, VIVIR y seguir disfrutando de todas las personas que me han apoyado desde el minuto cero. Mil gracias.