Un año, dos canciones... Muchos recuerdos

Hace unas semanas me recordaron que en muy breve tiempo iba a hacer un año en el que se nos terminó el contrato de Joven Cooperante. Yo decidí no prolongar mi estancia salvadoreña, pero me dio mucha pena tener que despedirme de la gente maravillosa que conocí allí.

Pues bien, hoy hace precisamente un año que dije adiós a la 30-B /R-55 (único autobús que me atrevía a “agarrar” yo sola), a mi casa y mi familia salvadoreña, a mis “cheros”, a mis compañeros de trabajo, a la San Luis, a Metrocentro, al Pollo Campero, al arroz, las tortillas (que no son como las de aquí), a las pupusas, a los trabazones, a La Luna, a la cultura, al lenguaje…. Esto último es una de las cosas que más echo de menos. Así que, siempre que puedo, aunque sea a través de msn intento recuperar expresiones que aquí no puedo decir porque no me entienden.

No es la primera vez que hablo de mi estancia en ese país. Hoy, por ser un día especial lo voy recordar con las dos canciones que me hacen recordarlo en cuanto las oigo. Vasos Vacíos de Los Fabulosos Cadillacs junto con Celia Cruz me recuerda a mis amigos salvadoreños.



Unas personas estupendas que me “rescataron” en el momento que más lo necesitaba, y me enseñaron su país. Una lástima no haberlos conocido antes, porque estoy segura que de haber sido así, hubiera conocido prácticamente todos los rincones de “El valle de las hamacas”. ¿Sabéis porque se le llama así a El Salvador? Por los continuos temblores de tierra que tiene. Algo tan habitual que ni se llegan a notar. Nunca pensé que llegaría a no sentir un “temblor”, porque era una de las razones por las que casi no experimento esta aventura. Pero mereció la pena ir, sentir y sobre todo aprender. Porque si algo hice en esos nueve meses gracias a ellos fue aprender.

La segunda canción me recuerda a la oficina en la que trabajé. Inevitable. Pasé muy buenos ratos escuchándola… Casi a primera hora de la mañana.

Mi Primer Millón – Bacilos


Dos canciones que me transmiten muy buenas vibraciones... Y llevo un tiempo que me hace falta sentirlas.